La decisión fue tomada en la 67 Asamblea Anual del organismo
sanitario internacional que deliberó en Ginebra y es el corolario de elogios de
reconocidos expertos a la política sanitaria nacional expresados durante esa
cita.
Argentina fue elegida para presidir el grupo de acción de la
Organización Mundial de la Salud (OMS) para la colaboración internacional en
estrategias contra los medicamentos
falsificados, entre otras resoluciones adoptadas por la 67ª Asamblea
Mundial del organismo sanitario internacional que deliberó en Ginebra.
La designación de Argentina fue dispuesta el sábado pasado,
en una reunión del "Mecanismo de Estados Miembro de la OMS sobre Productos
Médicos de Calidad Subestándar, Espurios, de Etiquetado Engañoso, Falsificados
o de Imitación (SSFFC)" en la que varios países expresaron su preocupación
y reclamaron más esfuerzos para combatir esta problemática. En esa reunión se consideró que se trata de
un problema de salud pública que debe ser monitoreado por sistemas nacionales y
mundiales. La OMS advirtió que las
consecuencias del uso de medicamentos falsificados "pueden ser el fracaso
terapéutico o, incluso, la muerte".
"Que hayamos sido elegidos para conducir un área
novedosa y estratégica de la OMS es la expresión clara del rol activo que
Argentina tiene en el contexto político internacional, en el que se reconoció
nuestro liderazgo en el combate a los medicamentos falsificados", sostuvo el
ministro de Salud de la Nación, Juan Manzur. "Este es un logro nacional
pero de alcance regional, ya que es fruto del trabajo articulado con los países
de la UNASUR (Unión de Naciones Suramericanas) iniciado años atrás",
enfatizó.
El ministro recordó que en el ámbito de la cartera a su
cargo funciona el sistema de trazabilidad de medicamentos de la Administración
Nacional de Medicamentos Alimentos y Tecnologías Médicas (ANMAT), que consiste
en la identificación individual y unívoca de cada unidad de las especialidades
medicinales a ser comercializadas, a fin de efectuar su seguimiento a través de
toda la cadena de distribución con el objeto de asegurar el control de los
medicamentos y contribuir a erradicar la circulación de aquellos que sean
ilegítimos.
El trabajo argentino en la prevención y control de productos
médicos de naturaleza ilegítima también fue elogiado días atrás por la
secretaria de Salud de Estados Unidos, Kathleen Sebelius, en una reunión que
mantuvo con Manzur en Ginebra.
En 2012, Argentina fue anfitriona de la primera reunión de
este grupo de acción de los Estados miembros de la OMS, que se llevó a cabo en
Buenos Aires con la asistencia de la directora general del organismo
internacional, Margaret Chan.
La OMS eligió como presidente del mecanismo al embajador
argentino ante los organismos internacionales con sede en Ginebra, Alberto
D'Alotto, quien señaló que la designación "tiene mucha implicancia por la
gran preocupación internacional por este verdadero flagelo" de la
proliferación de medicamentos falsos. "Tomamos la delantera desde hace
mucho y ahora tenemos la responsabilidad de encabezar un proceso para crear la
normativa necesaria para combatir los medicamentos falsificados",
puntualizó el diplomático.
El mecanismo de la OMS
que Argentina encabezará hasta el año próximo apunta a la colaboración
internacional en el abordaje y análisis del tema de la falsificación de
medicamentos, desde una perspectiva de salud pública y con exclusión de
consideraciones relacionadas con el comercio y la propiedad internacional. Entre sus objetivos se destacan la
identificación de necesidades y obstáculos; la formulación de recomendaciones
de política; y la creación de instrumentos en el área de prevención, detección
y control de medicamentos que no posean las garantías debidas de seguridad,
calidad y eficacia.
La seguridad de los productos médicos entraña una
problemática compleja, donde coexisten diversos intereses, algunas veces
encontrados. De allí la importancia de que este
mecanismo de la OMS establezca un mandato claro, reconociendo una
perspectiva de salud pública y poniendo como eje la seguridad y salud de los
pacientes por encima de cualquier interés comercial.
Al respecto, el Viceministro de Salud de la Nación, Eduardo Bustos Villar, señaló que "la
circulación de estos productos pone en riesgo la salud de las personas al mismo
tiempo que socaba la confianza sobre los productos médicos legítimos, seguros,
de calidad y eficaces". Los productos médicos falsificados constituyen un problema
sanitario que trasciende las fronteras y requiere la intervención articulada de
los Estados.
"El trabajo conjunto con la ANMAT, la Cancillería
argentina y su misión permanente en Ginebra, ha puesto este tema en la agenda
de salud global y los Estados de todo el mundo están reconociendo la
importancia de tomar medidas frente a una problemática con impacto negativo
sobre la salud de la población", remarcó Bustos Villar.
Por su parte, el titular de la ANMAT, Carlos Chiale, puso de
relieve que "consolidar una estrategia global permite mejorar las
capacidades operativas y regulatorias y al mismo tiempo fortalecer la
comunicación entre los países para el combate a la falsificación de productos
médicos con foco en la protección de la salud pública". "Es un
importante desafío y reconocimiento para la Argentina ser líderes en la
problemática de productos ilegítimos", agregó.
Durante las reuniones de la OMS en Ginebra, la delegación
argentina presentó una resolución para avanzar sobre el fortalecimiento de los
sistemas de reglamentación farmacéutica en materia de productos
bio-terapéuticos similares, iniciativa que finalmente fue aprobada por
unanimidad.
La resolución presentada por Argentina había sido promovida
por la UNASUR y establece que "los productos bio-terapéuticos similares
podrían ser más asequibles y ofrecer un mejor acceso a tratamientos de origen
biológico garantizando simultáneamente su calidad, seguridad y eficacia".
En este sentido, instó a los Estados Miembros de la OMS "a trabajar para garantizar
que la introducción, cuando proceda, de nuevas reglamentaciones nacionales no
constituya una barrera al acceso a productos bio-terapéuticos, incluyendo
bio-terapéuticos similares, de calidad, seguros, eficaces y asequibles."
Fuente: Ministerio de Salud de la Nación