jueves, 20 de octubre de 2016

La ANMAT amplía recomendaciones para un medicamento oncológico

La agencia reguladora informó que aprobó el uso de Nivolumab para el tratamiento de linfoma de Hodgkin clásico. Hace unos meses, el fármaco había recibido el visto bueno para utilizarse en otros tumores.               

A comienzos del año, las autoridades sanitarias argentinas dieron el visto bueno para tratar a pacientes con cuadros severos de cáncer de pulmón, renal y melanoma con el medicamento oncológico Nivolumab. Esta semana, se ampliaron las recomendaciones para este fármaco, cuya marca comercial más conocida es producida por el laboratorio Bristol-Myers Squibb, y comenzará a usarse en el país para tratar el linfoma de Hodgkin clásico. Según los ensayos clínicos que respaldan la decisión, dos de cada tres personas con esta enfermedad responden adecuadamente al tratamiento.

La ampliación en el uso de Nivolumab fue confirmada esta semana por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT), que aprobó su aplicación en personas con linfoma de Hodgkin clásico que no responden al tratamiento inicial o tengan recaída. Según los especialistas, este paso les agrega “una oportunidad de tratamiento”, que se demostró eficaz en dos de cada tres personas de las que participaron en los ensayos clínicos. "Esta terapia constituye una nueva alternativa para pacientes que ya se enfrentaron a múltiples líneas de tratamiento y en los que hay un progreso de la enfermedad", comentó Marta Zerga, presidenta de la Sociedad Argentina de Hematología y directora del Área Médica del Instituto Oncológico Ángel Roffo.

La médica consideró que "se trata de una estrategia innovadora al ser la primera terapia aprobada en el país que bloquea puntos de control inmune, activando la respuesta inmunológica del propio organismo".

El linfoma de Hodgkin clásico es un tipo particular de tumor del tejido linfático que produce agrandamiento ganglionar y se presenta más frecuentemente en gente joven, con un primer pico de incidencia entre los 16 y los 34 años y un segundo a partir de los 55. Desde su origen en un ganglio o grupo ganglionar, el linfoma de Hodgkin se disemina a otras regiones ganglionares, pudiendo comprometer otros órganos en etapas avanzadas de la enfermedad.

El tratamiento de quimioterapia convencional (sólo o asociado a radioterapia) permite curar a un porcentaje significativo de pacientes, pero entre el 5 y el 10 por ciento de ellos no responden al tratamiento inicial (pacientes refractarios) y entre un 15 y un 25 por ciento sufre una recaída. "Los pacientes recaídos o refractarios cuentan ahora con nuevas estrategias terapéuticas", informó la especialista.

La nueva inmunoterapia ya había sido aprobada por ANMAT en mayo pasado para el tratamiento de pacientes con enfermedad metastásica de la forma más frecuente de cáncer de pulmón, cáncer renal y melanoma.

Fuente: Mirada Profesional